Sunday, January 18, 2009

Viaje a Chile - Historia Larga

En mi último post comenté en un párrafo mi viaje a Chile. Me parece que no es suficiente honor a volver a estar en la tierra que te vió nacer.

El viaje era principalmente de trabajo: la gente de NIC Chile organizó un evento para invitar a mi jefa, una eminencia en el tema de mediciones (measurement) de Internet y el apoyo que éstos brindan al desarrollo de políticas públicas. Eso se acomodó también con una invitación de las Jornadas Chilenas de la Computación (a realizarse en Punta Arenas) para dar una charla sobre las o menos la misma idea. Si les interesa saber, las presentaciones del evento OpenNIC están disponibles online. Por diversas razones no hubo espacio para que yo diera una charla, así que mi trabajo fue principalmente encargarse de la logística de llevar a mi jefa, su esposo y sus padres a Chile.

Pero, ¿qué tanto trabajo puede ser organizar un trabajo para cinco personas a Chile?. La respuesta es, muchísimo. Primero, no pude delegar ninguna parte del trabajo (reserva en hotel, pasajes aéreos, transporte) al personal administrativo de CAIDA por la escasez de sitios en inglés para esas tareas. Para las reservas de hotel, había que ajustarse a aquellos que estuvieran dispuestos a trabajar con universidades en Chile; para el transporte, los transfers tienen pésimo servicio bilingüe; para los pasajes aéreos dentro de Chile, LAN ofrece precios 3 veces más caros en inglés que en español, y menor variedad de vuelos. Como dijo una chica que me ayudaba, "what a rip off!". Otro factor que aumentó el nivel de trabajo fue que dado que íbamos a viajar 16 horas en avión a Chile, porque no quedarse unos días a conocer, en particular el sur de Chile.
Sólo los hoteles más caros tienen servicio bilingüe por Internet para hacer reservas, si buscas una alternativa más económica no hay modo. Además, los precios publicados son diferentes a los que puedas conseguir por teléfono hablando en "dialecto local". Cuando un mes después leí el artículo de Natalia Romero llamado "Do you like Chile", no pude estar más de acuerdo.

Nuestro itinerario fue 2 noches en Santiago, dos noches en Punta Arenas y tres noches en Puerto Natales. En Santiago, las actividades fueron principalmente ir al Cerro San Cristóbal, almuerzo en Las Delicias de Quirihue, y mientras KC y yo trabajábamos, el resto de la tripulación tomó un tour al Cajón del Maipo y una caminata por el centro de Santiago (donde casi fueron víctimas de un cartereo). Mientras estuvimos en Punta Arenas, caminata por el centro, mucha centolla y cordero magallánico, viaje al Fuerte Bulnes y Punta Santa Ana y las Pinguineras del Seno Otway. Luego viajamos a Puerto Natales por tierra (manejando una Mitsubishi Montero) para visitar en días seguidos el Parque Nacional Torres del Paine: un día en auto con parada en la Cueva del Milodón y al día siguiente en bote por el Seno de Última Esperanza, con paradas en los glaciares Balmaceda y Serrano.

El único punto negro de nuestro viaje fue en el camino de vuelta desde Punta Arenas a Santiago. La empresa a la cual arrendamos el auto se atrasó en llegar al aeropuerto para recibir el vehículo de vuelta, lo que implicó que me dejaron fuera del avión y mis compañeros de viaje se fueron solos, sin la posibilidad de despedirse (pues yo me quedaba en Santiago y ellos seguían camino a San Diego).

En mi segunda semana en Chile me dediqué a reunirme con mi profesor acerca de mi tesis, juntarme con colegas y amigos a compartir una buena comida y una buena charla, disfrutar del cariño de mis padres y mi hermana. La pena de todo esto fue ver a mi suegra y mi cuñada, lamentando haber dejado a Maribel en San Diego. Ella siempre ha sido apegada a su familia, pero las condiciones no se han dado para que podamos viajar todos, permitiendo el reencuentro de padres-hija, nietos-abuelos, tias-sobrinos, etc.

Que resultó de todo el viaje: buenos contactos profesionales, mi jefa feliz por la oportunidad de conocer las maravillas naturales de mi país (como pueden ver que comentó en su blog), volver a sentir el sabor de mi país (para bien y para mal), y muchísimas fotos.

Los invito a visitar algunas de las galerías del viaje en Picasa:
Finalmente, pero no menos importante, muchas gracias a todos los amigos que mostraron su cariño y hospitalidad mientras estuve en Chile. Espero verlos pronto!

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