Wednesday, May 23, 2007

Autos


Bueno, gracias a las gestiones de Patricio Poblete (gracias profe) y la paciencia de mi papá, pude conseguir seguro para el auto y por lo mismo, puedo conducirlo.

Después de pasar varios días cotizando seguro, me decidí por la AAA of South California (American Automobile Club), que me ofrecían el mejor precio, aceptaban que no tuviera licencia definitiva en California. El gran pero fue que requerían prueba de mi vida como conductor, donde mostrara que no tenía antecedentes o infracciones graves. La respuesta era solicitar mi hoja de vida del conductor en el Registro Civil. El certificado no se entrega por Internet, pero había tenido la providencia de dejar un Mandato General a mi papá para que me representara.

El fue con este documento al Registro Civil, donde el funcionario que lo atendió lo leyó completo, para decirle que dicho poder no le servía porque no indicaba explicitamente autorización para pedir ese documento (las palabras fueron que tenía poder para representarme, no investigarme). Molesto entonces le solicité ayuda a Fernando Bernhardt (que me ayudó con el poder) y al profesor Patricio Poblete por si podía consultar internamente en el mentado organismo.
Fernando me dijo que la enumeración en el poder era ilustrativa y que el poder era suficientemente amplio. El profesor me contactó con la persona correcta para hacer que esto funcionara.

Cuento corto, mi papá fue al Registro Civil, consiguió el documento y me lo mandó digitalizado. Yo derivé esa copia al agente del seguro mas copia de mi licencia y en unas cuatro horas tenía mi seguro por un año.


Ahi que ahora, estamos listos para manejar!

Saturday, May 12, 2007

Dos semanas sin postear, mucho que contar

Que flojo estoy para postear.

Mi vida esta vuelta un desastre, pero esperamos encauzarla nuevamente.

En un post que había escrito hace dos semanas y que tenía guardado, hablaba sobre los desafíos profesionales que me quedaron de mi viaje a Puerto Rico. Pero no he mencionado algo importante que me quedó para mi experiencia de vida después de visitar San Juan. Aquí quiero hacer un público reconocimiento a mi amiga Iveliz, que fué muy gentil en llevarnos de paseo durante medío día a las atracciones de la ciudad, a Brad y a mí. Gracias Ivy por las largas charlas, por el cariño y la sabiduría (y las invitaciones a cenar).


Antes de viajar a Puerto Rico estaba en serias dificultades económicas: mis reservas de dinero se estaban acabando y ni la UCSD ni la Universidad de Chile se pronunciaban sobre mis respectivas ayudas de viaje. Al volver de viaje, todo estaba normalizado y algunos gastos pendientes se podían hacer.

Otro hecho importante que sucedió fue que finalmente compramos auto. Habíamos sido muy desafortunados con los intentos, pues encontrabamos autos que no estaban bien. A un precio razonable ($3850) compramos una Honda Odyssey EX año 95 (minivan).

El gran oh oh vino después de comprarla: para conducir el DMV (Department of Motor Vehicles) exigía que el auto tuviera seguro. Al empezar a cotizar, no encontré compañías que vendieran a gente con licencia extranjera (creo que tampoco busqué muy bien, después si encontré). Así que me puse en campaña máxima para sacar mi licencia de conducir de California.

Fui el día jueves 10 de Mayo a las oficinas, llené mi formulario, pagué la tarifa ($27), pasé el examen de la vista, me tomaron la foto y di el examen escrito (para el cual sólo había estudiado la noche anterior). Con eso me entregaron un permiso de conducir provisional, hasta que dé mi examen práctico el 4 de Junio (para el cual no debería tener ningún problema). Hecho eso me puse a buscar seguro para el auto. Espero tener este Lunes novedades.

Así las cosas van avanzando. Mi experimento parece estar terminado, aunque aparecieron un par de cosas bien interesantes que tengo que investigar más (en realidad, presentar el reporte, ya hice el seguimiento). En Julio tengo que viajar a Chicago a un workshop para presentar lo trabajado. Ahora aparecen en mi horizonte dos o tres proyectos bien grandes para hacer en el DNS.

Finalmente, esta semana estuvo de visita en San Diego, mi colega Eduardo Mercader de NIC Chile (en rigor en mi superior directo). En la medida de lo posible le mostramos la ciudad y lo invitamos a cenar a la casa. También estuvo de vista en CAIDA el día Martes por unas horas, lo que sirvió para discutir con KC y Marina un par de cosas y para escuchar algo que me hacía falta saber: que mi trabajo se apreciaba.

Luego publicaré contando sobre la absorción del inglés de parte de mis hijos y Maribel.